Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

I Juan 2, 2-14

2 El es víctima de propiciación por nuestros pecados, no sólo por los
nuestros, sino también por los del mundo entero.

3 En esto sabemos que le conocemos: en que guardamos sus
mandamientos.


4 Quien dice: «Yo le conozco» y no guarda sus mandamientos es un
mentiroso y la verdad no está en él.

5 Pero quien guarda su Palabra, ciertamente en él el amor de Dios ha
llegado a su plenitud. En esto conocemos que estamos en él.

6 Quien dice que permanece en él, debe vivir como vivió él.

7 Queridos, no os escribo un mandamiento nuevo, sino el
mandamiento antiguo, que tenéis desde el principio. Este mandamiento
antiguo es la Palabra que habéis escuchado.

8 Y sin embargo, os escribo un mandamiento nuevo - lo cual es
verdadero en él y en vosotros - pues las tinieblas pasan y la luz verdadera
brilla ya.

9 Quien dice que está en la luz y aborrece a su hermano, está aún en
las tinieblas.

10 Quien ama a su hermano permanece en la luz y no tropieza.

11 Pero quien aborrece a su hermano está en las tinieblas, camina en
las tinieblas, no sabe a dónde va, porque las tinieblas han cegado sus ojos.

12 Os escribo a vosotros, hijos míos, porque se os han perdonado los
pecados por su nombre.

13 Os escribo a vosotros, padres, porque conocéis al que es desde el
principio. Os escribo a vosotros, jóvenes, porque habéis
vencido al
Maligno.

14 Os he escrito a vosotros, hijos míos, porque conocéis al Padre, Os
he escrito, padres, porque conocéis al que es desde el principio. Os
he
escrito, jóvenes, porque sois fuertes y la Palabra de Dios permanece
en
vosotros y habéis vencido al Maligno.